Las nuevas tecnologías, y en especial las aplicaciones de mensajería instantánea, suponen un nuevo planteamiento en algunos ámbitos legales. Hoy en Lapeña & De Benito explicamos algunos de los problemas más comunes relacionados con esta red social.
Algunos de los problemas legales más comunes en WhatssApp
Con WhatsApp han surgido situaciones problemáticas que pueden llegar a los tribunales. Hoy en día podemos encontrar diversas sentencias sobre cuestiones que tienen el origen del problema en un mensaje de WhatsApp o incluso la foto de perfil de usuario.
Por ejemplo, el Tribunal Supremo impuso una sanción a un guardia civil por haberse fotografiado de uniforme junto al cadáver de un preso fugado al que habían perseguido. Esta imagen la envió a un grupo de WhatsApp.
Mofarse de un superior o entrometerse con el honor de una persona
Otro guardia civil fue sancionado con una suspensión en sus funciones porque superior entendió que el texto que había puesto en su estado de la aplicación se mofaba de él. Aunque, finalmente, el Tribunal Supremo anuló la sanción porque no se acreditaba que el guardia civil hablara del sargento que se había dado por aludido.
Por otro lado, un médico tuvo que indemnizar con 2000 euros a un compañero por intromisión en su honor. Esta sentencia le condenó por aludir a su compañero con la expresión “No te fies de F.S.O”. El juez le obligó a poner durante un mes como estado en su perfil que ha sido condenado por intromisión en el honor de esta persona.
Insultos y fotografías
La Audiencia Provincial de Burgos condenó a un hombre y una mujer con una pena de un año de prisión, indemnización a la víctima con 3000€ y una multa de 6euros diarios durante 12 meses por un delito de revelación de secretos. Los dos acusados publicaron una foto de la ex pareja del primero sin la parte superior del bañador.
Mensajes y conversaciones como prueba en un juicio: ¿son válidos?
WhatsApp es uno de los medios más empleados para mantener conversaciones. Por eso, tanto los audios, como las imágenes, los vídeos o las propias conversaciones se han convertido en una vía para poder demostrar ciertos hechos controvertidos en juzgados y tribunales cuando surge cualquier conflicto.
Aunque se deben aclarar una serie de aspectos para poder conocer la validez de la prueba en el juicio. Para que tengan validez ante el juez, las conversaciones tienen que estar certificadas y autentificadas. Es decir, para que se acepte como prueba, el perito debe identificar el origen de la conversación, la identidad de los interlocutores y el contenido.
Es necesario que un perito informático revise estas conversaciones porque hoy en día podemos encontrar sistemas o aplicaciones capaces de generar conversaciones falsas. Este tipo de aplicaciones pueden suplantar una conversación real, pudiendo modificar la hora de envío, el estado de recepción, el emisor, etc.
Un perito informático cuenta con los conocimientos y los medios necesarios para poder extraer las conversaciones originales de la aplicación. De esta manera, el juez no puede desestimar la prueba pericial aportada. Podemos decir que el perito se encarga de extraer las conversaciones originales de cualquier aplicación, certificarlas y custodiar la cadena de custodia.
Si quieres presentar este tipo de pruebas en un juicio, será esencial estar debidamente informado y asesorado. En Lapeña & De Benito contamos con profesionales expertos en derecho civil y penal que te ayudarán a resolver todas tus dudas.