Derecho penal, abogados en Tenerife
La Audiencia Provincial ha condenado al dueño del Pub Dragón a 3,5 años de cárcel por manipular el equipo de música y superar los 100 decibelios causando ansiedad a sus vecinos.
En Brunete, un pequeño pueblo de 10.000 habitantes en la localidad de Madrid, una familia ha vivido un infierno durante 5 años al instalarse justo debajo el Pub Dragón. Con el miedo que provoca vivir encima de un local de copas, el Pub Dragón comenzó a funcionar y efectivamente su sonido era atronador debido a la música demasiado alta.
Antes de acudir a las autoridades, la familia intento establecer una vía comunicativa con el dueño del local, sin embargo, el hizo caso omiso. Por ello decidieron acudir a los tribunales, presentando en el Ayuntamiento de Brunete, de su puño y letra, lo que estaba sufriendo su familia.
Al contrario de lo que se puede imaginar, no obtuvo resultado, por lo que acabo interponiendo hasta una cuantía de 30 denuncias. Finalmente el ayuntamiento decidió abrir un expediente e inspeccionar el establecimiento. Cuando un perito se presentó en el local y examinó el equipo de música certifico que el limitador del sonido estaba desactivado a voluntad propia. Tras la medición pertinente, el equipo estaba superando los 100 decibelios en el local, lo que se traducía en 46 decibelios en la casa que estaba siendo afectada.
Ya con el informe en mano, la familia interpuso una demanda en los tribunales alegando trastornos del sueño, ansiedad, insomnio y depresión gracias a informes médicos que así lo certificaban, todo ello derivado de la música que les impedía dormir.
Una vez resuelta la denuncia por el Juzgado de lo Penal, el dueño del Pub Dragón fue sentenciado a cuatro años y tres meses de prisión por delito contra el medio ambiente y a tres años por los daños causados a la familia.
Finalmente, tras recurrir la sentencia por ambas partes y una petición de la Fiscalía a incrementar la pena, ha sido condenado a tres años y medio ya que este ruido puede perjudicar gravemente el equilibrio y la salud de las personas. Un grave peligro para la salud de la familia que vivía justo encima del pub siendo consciente de que el limitador de potencia estaba manipulado.